He llegado a un punto en el que las decepciones son tan grandes que debía expresarme, no entiendo como esta manera de realizar las cosas puede tocar tantos aspectos de nuestra vida cotidiana, y a la vez que nadie haga el mínimo esfuerzo por intentar cambiarlo.
Me centrare, mas detenidamente, en las ideas preconcebidas con las personas, digo con y no de, porque quiero referirme a que la primera impresión ya no es lo que nos hace opinar de una persona, sino las ideas inducidas a nuestra cabeza por cosas que oímos o que nos cuentan. Lo mas curioso, es que eso nos basta para juzgar a alguien, no tenemos ni el mas mínimo interesen en contrastar eso, es indignante que haya gente tan superficial que las ideas de los demás tengan que ser las suyas propias para opinar sobre alguien y no entretenerse en conocerle.
Para hacerlo mas fácil de masticar, me referirse a mi caso:
Por A o por B yo siempre una persona abierta amigo de mis amigos y nunca me ha importado conocer a nadie, pero, de niño, comparado con lo que soy ahora eso era un niño, tuve una época en la que mi afición particular era hablar con muchas chicas a la vez.
Si, me gustaba hablar con chicas y les decía cosas bonitas claro esta, aunque la cosa que empezó como una cosa sin maldad y entretenida acabo como algo que toda la gente se digno a juzgar. En ese momento yo era la figura ejemplar de lo que con mas edad he comprendido que es ser un golfo, porque hablaba con muchas chicas y les decía cosas bonitas a todas.
La gente me empezó a juzgar por algo que ni siquiera supuse que fuese malo y que hacia para sentirme un poco querido..., lo que la gente no sabia es que yo buscaba en esas chicas el cariño que nunca había tenido de ellas de chiquitín cuando todos empezaban con los besitos y los novios y novias y yo era el típico gordito gracioso que todo el mundo encontraba monismo y para comérselo. Solo buscaba cariño.
Por ese motivo era tan cariñoso con todas, tonto de mi no darme cuenta que ese no era el camino a seguir... los años pasaban y yo fui aprendiendo del error. La vida me ha dado bastantes reveses desde entonces, lo que me ha hecho madurar muy rápido en poco tiempo, por ese motivo decidí ya hace tiempo que mi corazón no iba a ser tan fácil de romper como mi inocencia, y el amor me iba a hacer sufrir, prefería sufrir por mi familia por mis amigos y por las cosas que me importan, que por voces de gente que ni me conocía, pero es aquí en este punto cuando aparecen las ideas preconcebidas a las que hacia referencia al principio, toda esa época de la cual hace mas de 5 años aun me arrastra a que la gente hable y no me permita poder ser yo mismo con ninguna mujer o incluso con chicos que ni se fían de que que hable con sus parejas que ademas son mis amigas, ya que las primeras palabras que oigo la mayoría de veces es o ya se quien eres o me han hablado de ti y yo pensando: -las ideas preconcebidas ya han llegado de nuevo...
Lo único que he pretendido estos años es conocer a alguien y poder sentir algo que nunca he sentido por nadie, poder decir que por una vez en la vida tengo a alguien que piense en mi y que me quiera y yo a ella, y eso solo me ha llevado a darme cuenta de que la gente prefiere las ideas preconcebidas, a conocer a la persona de verdad. Al final mi rutina se ha vuelto, un pez que se muerde la cola, intentar conocer a alguien que esta lo comente a alguien y pasar de mi y así sucesivamente.
En momentos esporádicos surgía alguien dispuesto a conocerme pero todo este ciclo ya había hecho mella en mi y me ha hecho crear una coraza que es muy difícil de destapar, esta coraza solo sirve de protección a todos esos ataques y a esa voces, son unos tapones contra todos esos argumentos sin fundamentar que avivan a la gente a llenarse la boca de cosas que no son ni una centésima parte de lo que soy.
esto es lo que provocan las ideas preconcebidas, que la gente se pierda a personas que no se esperan para nada lo que son en realidad y que esas personas solo sean ellos mismos con la gente que de verdad les demuestre que les valoran, un consejo: a la mierda las ideas preconcebidas, seréis mas felices.
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